Prensa Fan Bus
Hace exactamente veinticinco años, el día en que Solaris produjo su primer autobús urbano de piso bajo. Casi todo ha cambiado en la empresa desde entonces. El transporte urbano europeo también ha experimentado una profunda transformación, con la gran ayuda de los autobuses Urbino. Solaris celebra hoy su aniversario, destacando que la insólita historia de la empresa, y su espectacular desarrollo, son fruto, sobre todo, del esfuerzo de sus empleados que comparten todos los mismos valores.
El 22 de marzo de 1996 fue el día en que salió el primer autobús de Solaris desde la fábrica de Bolechowo. En ese momento, la empresa empleaba apenas a 36 personas y producía 56 vehículos de piso bajo en todo un año. Hoy en día, unas 2700 personas trabajan, en Polonia y en el extranjero, para el éxito internacional de Solaris, mientras que el número de vehículos desplegados en las ciudades europeas en los últimos 12 meses llegó a 1560, de los cuales casi 700 tenían motores eléctricos.
La innovación ha sido la clave del éxito de mercado de la empresa desde el principio. Hace dos décadas, Solaris invirtió su dinero en la electromovilidad y desde entonces ha estado trabajando en tecnologías que reducen el impacto en nuestro entorno natural. Hoy en día, la cartera de Urbino de cero emisiones incluye autobuses de hidrógeno, autobuses eléctricos y trolebuses, mientras que Solaris ha alcanzado una posición de liderazgo en Europa en este sentido: un experto galardonado en el sector y miembro activo de asociaciones y consorcios.
Con la ventaja del conocimiento adquirido al diseñar y construir más de 20,000 vehículos, Solaris ahora puede mirar hacia el futuro con confianza, fijándose el ambicioso objetivo de cambiar la imagen del transporte público por una más verde, más accesible y sostenible, con cada uno de ellos. nuevo contrato que realiza. Además de ofrecer a sus clientes los mejores productos y servicios, Solaris está decidida, sobre todo, a apoyar a los operadores de transporte público y autoridades de la ciudad en el proceso de transformar ese transporte en un servicio limpio, silencioso y atractivo para los residentes. Este objetivo surge de la convicción de que el transporte público moderno es la base de las ciudades sostenibles.
El primer vehículo de la familia Urbino se estrenó en 1999 (Foto: Grzegorz Muszyński)
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