Mercedes -Benz do Brasil y Robert Bosch Latin America culminaron las obras de construcción de las vías del CTVI (Centro de Pruebas Vehiculares de Iracemápolis), en el interior de São Paulo. Este es el complejo de pruebas más tecnológico del Hemisferio Sur para el desarrollo y homologación de productos y componentes para camiones, autobuses, automóviles, vehículos comerciales ligeros y maquinaria agrícola.
Diseñado para satisfacer las demandas de pruebas y simulación de fabricantes de vehículos, sistemas, autopartes y otras empresas del sector automotriz, el CTVI cuenta con cinco carriles para evaluaciones de seguridad de vehículos, eficiencia energética y nuevas tecnologías de asistencia al conductor.
“Al poner esta nueva y moderna estructura a disposición de otras empresas del sector, estamos contribuyendo al desarrollo de la industria automotriz. Con la importante diferencia de que toda la estructura estará concentrada en un solo lugar, optimizando procesos y asegurando ganancias en eficiencia, agilidad y productividad, con calidad, seguridad y confiabilidad”, dice Achim Puchert, presidente de Mercedes-Benz do Brasil y CEO América Latín. “De esta manera, entregamos un gran legado para el sector automotriz y también para la industria brasileña y latinoamericana”.
“Con la mirada puesta en el presente y en el futuro, este proyecto también es un gran logro para toda la ingeniería de movilidad brasileña, ya que favorece el desarrollo de proyectos con ganancias en tiempo y logística en una infraestructura con estándares internacionales. Además, el CTVI está totalmente alineado con nuestra estrategia “local for local”, que se enfoca en establecer centros de competencia locales para satisfacer las demandas de nuestros clientes”, destaca Gastón Díaz Pérez, presidente y CEO de Robert Bosch Latinoamérica.
CTVI amplía la gama de pruebas de vehículos en Brasil
Con un concepto y una estructura similares a los de países como Alemania, EE. UU., China y Japón, el CTVI ampliará la gama de pruebas de vehículos en Brasil, acelerando el desarrollo y aprobación de productos y tecnologías.
Entre las pruebas destacan el Programa Electrónico de Estabilidad (ESP®), el Frenado Automático de Emergencia, la protección de peatones y ciclistas (AEB) y los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (ADAS), además de la eficiencia energética y la conducción autónoma y semiautónoma. “El desarrollo de tecnologías orientadas a la seguridad activa y asistencia a la conducción como radar, ultrasonido y video, que próximamente se llevarán a cabo en el CTVI, acelerarán oportunidades para una conducción más segura y cómoda”, agrega Díaz Pérez.
En un área de 400.000 metros cuadrados, el CTVI fue construido junto al Campo de Pruebas Mercedes-Benz do Brasil en Iracemápolis, inaugurado en 2018.
La pista Oval de Alta Velocidad (HSO) es uno de los puntos destacados del complejo. Esta zona está formada por dos rectas paralelas de 960 metros cada una y dos curvas de asfalto desfasadas en 3 ángulos diferentes, completando el circuito ovalado con una longitud total de 2.600 metros, tres carriles. El HSO permite realizar comprobaciones de alta velocidad, consumo de combustible, autonomía, refrigeración, ruido, confort del vehículo, manejabilidad y otros. También es posible probar las funciones de asistencia al conductor.
El Comfort Lane (CML) , adyacente al HSO, es un conjunto de 5 carriles con diferentes pisos y superficies irregulares para mediciones de estabilidad, suspensión y otros elementos.
Con 88 mil metros cuadrados de asfalto perfectamente plano y 220 metros de diámetro, el Área Dinámica Vehicular (VDA) permite numerosas maniobras con total seguridad y en condiciones ideales para experimentos como ESP® y AEB. También se puede utilizar para evaluaciones de vehículos híbridos, eléctricos, autónomos y funciones ADAS.
El área de Pista de Medición de Frenos (BMT) está compuesta por dos pistas paralelas e irrigables que aportan diferentes coeficientes de adherencia, que pueden ser utilizados en maniobras para mejorar los sistemas de seguridad activa, como ABS y ESP®.
Destinado a la estabilidad y las maniobras de conducción, el Paved Handling Course (PHC) , con 1,6 km de longitud y diferentes desniveles, está formado por curvas y serpenteos de diferentes radios y está disponible para pruebas de conducción y pruebas de turismos y vehículos comerciales ligeros.
El espacio contará con palcos de taller y oficinas individuales, además de estacionamientos para prototipos de vehículos en desarrollo, que también estarán disponibles para arrendamiento. Esto garantiza total privacidad y confidencialidad para las empresas de alquiler.
“CTVI nació con un fuerte propósito de ofrecer su moderna y completa infraestructura a todas las empresas del sector automotriz. La búsqueda del Centro de Pruebas se intensificó y ya estamos hablando con varios posibles clientes incluso antes del inicio de operaciones”, dice Andreas Hueller, Gerente de Proyectos de CTVI. “Además de todo el potencial tecnológico disponible para las empresas, otro gran diferencial es la ubicación, cerca de las grandes ciudades y del Aeropuerto de Viracopos, en una región muy bien servida por excelentes carreteras. Por cierto, el CTVI también se puede utilizar para eventos, ampliando sus posibilidades de uso”.
Preparando el mercado brasileño para vehículos y tecnologías del futuro
Para Achim Puchert, Mercedes-Benz do Brasil y Bosch están invirtiendo juntos en el futuro y permanecerán junto a los clientes, el mercado y el país. “En el horizonte de nuestra asociación, apuntamos a vehículos semiautónomos y autónomos, híbridos y eléctricos, todos conectados, digitales y compartiendo información que tienen como objetivo brindar más seguridad y comodidad a los conductores y pasajeros”.
“En este sentido, el CTVI es un hito más para Bosch y Mercedes-Benz do Brasil en el desarrollo de vehículos y soluciones cada vez más seguras e inteligentes, en línea con el compromiso de ambas empresas con el ecosistema de transporte responsable y la movilidad sostenible, reforzando los pilares ESG en las empresas. Con esta alianza reforzamos la confianza de nuestras empresas en el país y en el potencial del mercado interno y externo”, completa Díaz Pérez.
A su vez, Achim destaca que Mercedes-Benz do Brasil y Bosch, ambas de origen alemán, son marcas mundiales adelantadas a su tiempo, con ADN pionero y vanguardista en el desarrollo tecnológico de vehículos y componentes. “Esta asociación refuerza nuestro compromiso con la innovación y la creación de soluciones sostenibles para hoy y mañana”, dice. “La puesta en marcha del CTVI también reflejará el momento de transformación que atraviesa Mercedes-Benz do Brasil. Este trabajo nos ayuda a acelerar el desarrollo de soluciones para los clientes de la marca y nuevas posibilidades para nuestra Compañía, reforzando aún más el papel de Mercedes-Benz do Brasil en la plataforma de desarrollo global de Daimler Truck”.
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